Dar los regalos a mi hija y a los sobrinos es lo que mas me gusta de este día, ver sus caritas
de emoción no tiene precio. Recuerdo cada año en este día lo feliz que era sabiendo que al levantarme me iba a encontrar mi regalo... que tiempos!!! Y es que cuando uno se va haciendo mayor hay cosas que se pierden y es esa sensación, ese conquilleo que te recorria el cuerpo del dia de los REYES MAGOS.
Un abrazo.
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